
"Que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?) (1 Timoteo 3:4-5, RVR1960).
El ministerio y el matrimonio, el matrimonio y el ministerio, ambos no se pueden separar. Si el pastor es esposo de una mujer, su matrimonio influencia todo lo que él hace. El matrimonio no se encuentra de un lado y el ministerio de otro.
Sin embargo, a nosotros nos gusta clasificar todo en nuestra vida. En el ministerio, esto es imposible. Todo está conectado con todo. El matrimonio no es diferente. Un matrimonio fuerte siempre se va a reflejar en la presencia del pastor en el pulpito. Un matrimonio débil siempre va a dañar las decisiones tomadas por el esposo. Es de ayuda para la iglesia cuando el matrimonio pastoral es fuerte.
Nuestra iglesia tiene un equipo increíble. Los pastores, el personal, los lideres de grupos pequeños y los voluntarios son asombrosos. Ellos son muy trabajadores. Son fieles. Disfrutamos los unos de los otros.
Al parecer, esto se refleja. A menudo escucho comentarios de lo maravilloso que es todo el equipo, y que es muy obvio que nos queremos. Sin embargo, yo sé, que la relación humana mas vital que tengo es con mi esposa. Juntos, hemos perseverado durante muchas temporadas diferentes del trabajo de la iglesia. Ella siempre ha estado ahí: apoyando, amando, animando. Añoro crecer en mi productividad, pero no puedo imaginar tener todo este fruto sin ella. Ella ha sido un gran instrumento.
Nadie mas puede ayudar al pastor de la misma manera en que lo hace su esposa. Ella puede ser una fuente de vida, un lugar seguro; nadie mas puede serlo ni debería de serlo. Su animo, comodidad y apoyo puede impulsar al hombre. Ella usará sus dones en la iglesia, pero sus dones solamente se podrán sentir en el matrimonio. En otras palabras, alguien mas puede dar clase a los niños. Nadie mas puede sentarse en el sillón a media noche, apapachando y escuchando a su esposo. Su papel es único. Su papel es poderoso.
EL DEBER DEL PASTOR
El pastor debe de atender a su esposa. El ser un buen esposo y padre está en los requisitos (leer 1 Timoteo 3:4-5). He escuchado de iglesias que excluyen cualquier contacto o cualquier pregunta que tenga que ver con el matrimonio — eso es una locura.
Pablo le dijo a Timoteo que los pastores deben de ser fieles en el matrimonio y buenos lideres dentro del hogar. Es mas fácil para la esposa del pastor animar a su esposo cuando ella sido animada por su esposo primeramente.
Si está en el pastorado, recuerda este llamado. Eres llamado a servir adecuadamente a ella y a tus hijos. La palabra que usó Pablo es “gobierne.” Debes considerar, o gobernar, a tu familia en cada etapa y temporada. Oras por la iglesia tomando en consideración su etapa de desarrollo. Ahí gobiernas guiando al rebaño. Lo mismo debe de ser cierto para tu familia. Considera en dónde están y sirve.
ELLA ES UN MIEMBRO DE LA IGLESIA, SIEMPRE
Las personas a las que atiendas van a ir y venir. La gente se mueve, se salen de la iglesia, o se salen de tu iglesia, pero tu esposa siempre será parte de la iglesia en la que sirves. Ella siempre será parte del cuerpo. Algunos dirán que están contigo, solo para irse después de unos meses, pero tu esposa verdaderamente está contigo. Ella es para ti. Ella escuchará cada uno de tus sermones.
Recuerda esto. Ella tendrá el asiento principal en todo el crecimiento de tu iglesia. Vas a estimar a algunos miembros de a iglesia por su fidelidad — perfecto. También considera la fidelidad de ella. Ella va a dondequiera que tu vas. Ella escucha. Ella ora. Ella puede ser el miembro mas fiel de la iglesia.
Hónrala por eso. Recuerda, ella no puede irse a otra iglesia. Ella está contigo. Amala por eso.
LIDERAZGO DE SERVICIO EN EL HOGAR
Jesús nos enseñó el camino hacia la grandeza. El gran servicio. Los primeros son los últimos. En el hogar, asegúrate de practicar el liderazgo de servicio. Cuando lo hagas, también lo practicarás en la iglesia. Si eres el líder autocrático de tu hogar, entonces de esa misma manera vas a guiar a la iglesia. Esto es veneno. El practicar un liderazgo de servicio en tu hogar ayuda a la iglesia.
Si un pastor considera la perspectiva de su esposa, también lo hará en la iglesia. Mientras el pastor escucha, se vuelve en un buen oyente, lo cual es crucial en el ministerio.
Si un pastor considera sus fuerzas y debilidades en el hogar, también lo hará en la iglesia. El pastor es bueno en algunas cosas. La esposa es buena en otras. Él no puede hacerlo todo. La iglesia ya lo sabe. Al practicar esto en el hogar beneficiará a la iglesia.
Si un pastor considera los sentimientos de los miembros de su familia, también lo hará con la iglesia. Así crece su sensibilidad.
Si un pastor se preocupa por sus hijos, él se preocupará por las personas a as que ha sido llamado en la iglesia. Si un pastor saca la basura, limpia su jardín paga sus cuentas, no batallará con los pequeñas necesidades de la iglesia.
Tu hogar no es tu lugar para vacaionar. El amor de tu familia es un refugio, pero también es un lugar de trabajo. El hogar no solamente es un lugar en donde puedes desconectarte de tus verdaderas responsabilidades, como el trabajo de la iglesia. No, es un lugar en donde te esfuerzas por servir y amar.
AMA A TU ESPOSA
La Biblia es clara. Las esposas deben de respetar a su esposo. Los esposos deben amar a su esposa. Debemos amarlas de la manera adecuada, como Cristo ama a la iglesia. Somos de ejemplo para todos los esposos de la iglesia; debemos de dar nuestras vidas por nuestra esposa.
Primeramente, una de las maneras principales en que esto puede suceder es por tener honestidad y el corazón abierto hacia tu esposa. Por supuesto, hay alguna información que no compartimos — algunos asuntos de la iglesia, las vidas de otras personas, existen líneas que no debemos cruzar. Sin embargo, en cuanto a nuestra vida personal, debemos de ser lo mas abiertos posibles con nuestra esposa.
Ella te ama. Una manera en que puedes amarla es dejándola entrar a tu corazón. Ella necesita tener acceso como nadie mas. Ella necesita escucharte como nadie mas. Ábrele tu corazón.
En segundo lugar, no seas egocéntrico. Espero que ya te hayas dado cuenta que no eres tan grandioso como piensa tu fan numero uno, ni tampoco tan malo como piensa tu crítico numero uno. No creas ninguna de estas posiciones, las exageraciones. No obstante, a veces los líderes, incluyendo a los pastores, pueden caer en el egocentrismo. Arrepiéntete. Confiesa. No hay lugar para esto dentro de tu hogar. No eres la gran cosa. Eres un esposo. Eres un padre. Sirve y ama.
Tercero, asegúrate de amar a tu esposa con tu tiempo. Ella es un regalo de Dios para ti. Pasa tiempo con ella. Salgan a un cita. Aparten la fecha en su calendario para que ambos esperen ese día con ansias. En el ritmo frenético de la vida, esto será un ancla a la cual podrás aferrarte. Descansa con ella al final de día. Caminen y platiquen, procesen la vida juntos, sal de vacaciones con ella, de vez en cuando salgan sin hijos. Escápense y disfruten de su amor.
Cuando esto fluye en su matrimonio, de te dará el don de la perspectiva. La vida no se trata solamente de lo que haces por la iglesia. Su amor será una buena medicina, un ungüento para las dificultades de la vida, incluyendo el trabajo en la iglesia.
APOYA A TU ESPOSA
La gente va a tener expectativas de tu esposa, así que protégela. Ella es una mujer madura, así que ella puede hablar por si misma, pero tu apoyo es de gran ayuda.
Una manera de apoyar a tu esposa es animándola a tener un sistema de apoyo. Tal vez una mujer mayor puede invertir en tu esposa. Asegúrate de que tenga el tiempo para esta relación. Adicionalmente, ella se reunirá voluntariamente con otras mujeres. Ella las escuchará y las animará. Ella dará la mayor parte. Esto es bueno, pero estas no son amistades. Anímala a tener amistades en su vida, amistades mutuas con otras mujeres. Estas amistades la restaurarán y la refrescarán.
Otra manera de apoyar a tu esposa es dejar en claro las expectativas de la iglesia. Continua haciendolo. Una de las primeras cosas que hice cuando me convertí en pastor principal fue comunicar el papel de mi esposa. Ella no iba a ser líder del ministerio de mujeres. En esa etapa de su vida, con tres hijos pequeños, su enfoque no estaría completamente en los ministerios de la iglesia.
Por ultimo, apoya a tu esposa ayudándole a explorar sus dones a través de los años. Pasarás por muchas temporadas con ella. No solamente cambiarán esas temporadas, sino que ella también cambiará. Mientras lo hace, ella se dará cuenta de las cargas y dones que tiene. Ella te ayuda a perseguir tu llamado y tus dones. Regrésale ese favor.
HONRA A TU ESPOSA
Asegúrate de alagar a tu esposa en público. A mi esposa esto no le importa mucho, pero es importante que el cuerpo lo escuche. Obviamente, esto se puede hacer de manera egocéntrica: “Mírenme a mí y vean cuanto amo a mi esposa,”. Esto es repugnante. Sin embargo hay maneras apropiadas de honrar a tu esposa en la iglesia. Esto es de ayuda por muchas razones:
Primero, modela el matrimonio para la iglesia. Tanto los casados como los solteros son edificados por tu ejemplo.
Segundo, te humaniza. Tienes relaciones terrenales como cualquier otra persona. Eso es de humanos.
Tercero, desarrolla la confianza. Honrar sinceramente a tu esposa le hace saber a la iglesia que le eres fiel a tu esposa. En el tiempo en el que vivimos, esto es importante.
CONCLUSIÓN
No me puedo imaginar manejar la intensidad de la labor pastoral sin mi esposa. Ella ha sido el gran regalo de Dios para mí. No hay ninguna manera en la que yo pueda atesorarla lo suficiente. Tu matrimonio es un regalo de Dios. Atesóralo. Permite que tu hogar sea tu ministerio. Ha tener fruto en otro lugar, mejor tenlo en tu hogar.