
En Jeremías capítulo uno, leemos acerca del llamado en la vida de Jeremías. En el versículo 17 leemos una fuerte declaración que el Señor le dijo a Jeremías, “Levántate y prepárate para entrar en acción.” (NTV). El llamado en la vida de Jeremías era claro y la acción que se presentaba frente a él sería todo un reto, por eso era muy importante que se preparara.
Al igual que Jeremías, el proceso de preparación para el misionero a un campo fuera de su país es de suma importancia. El tiempo y el esfuerzo que se invierten en este proceso sin duda hará una diferencia en el ministerio que está por delante.
Una vez que tú y tu iglesia sientan el liderazgo del Espíritu Santo sobre tu vida para ir y servir al campo misionero foráneo, existen algunos pasos claves que deben de llevarse a cabo antes de que abordes el avión. Algunos de estos te ayudarán a que comiences a moverte en la dirección correcta.
1. ARMA UN EQUIPO DE APOYO
Una de las decisiones más importantes que puedes tomar durante tu tiempo de preparación antes de irte al campo misionero foráneo, es armar un equipo comprometido de apoyo. Antes de que mi familia y yo nos fuéramos a Alemania, un amigo nos recomendó mucho leer un libro llamado “Serving As Senders" (Sirviendo Como Enviadores) por Neal Pirolo. Tomamos el tiempo para leerlo y después comenzamos a organizar un grupo que pudiera respaldarnos. Mi familia y yo hemos sido bendecidos en gran manera con un equipo que ha estado con nosotros durante todos estos años. No te puedo decir lo importante que ha sido para nosotros contar con un equipo de apoyo que se ven a ellos mismos como parte de la misión.
Un equipo de apoyo tendrá un rol muy grande en cuanto a mantenerte en el campo misionero. Ellos estarán ahí cuando necesites a alguien con quien hablar. Estarán ahí para orar por ti mientras enfrentas diversas situaciones. Estarán ahí para animarte cuando necesites esas palabras de ánimo. En pocas palabras: están comprometidos con el Señor al apoyarte y animándote a continuar en la obra que Dios te ha llamado a hacer. ¡No dejes tu casa sin un equipo de apoyo!
Hay cosas que solamente se pueden aprender en el campo misionero, pero hay muchas cosas que puedes hacer antes de irte para que te vayas más preparado.
2. COMIENZA A TOMAR LOS PASOS LOGÍSTICOS
Para ser honesto, nunca estarás completamente preparado. Hay cosas que solamente se pueden aprender en el campo misionero, pero hay muchas cosas que puedes hacer antes de irte para que te vayas más preparado. Aquí hay algunas ideas prácticas que tal vez te ayuden a hacer una lluvia de ideas.
Lenguaje: ¿Vas a necesitar aprender un nuevo idioma? Si es así, ¿Cómo puedes iniciar el proceso antes de irte al campo misionero? ¿Hay alguien en tu iglesia que conozca el idioma que te pueda ayudar a tomar los primeros pasos, o hay alguna clase en una escuela que puedas comenzar a tomar? No pienses que necesitas hablar el idioma con fluidez antes de irte, pero cualquier paso que puedas comenzar a tomar desde ahorita te serán de mucho beneficio cuando llegues a ese país.
Cultura: ¿Qué libros puedes comenzar a leer para aprender sobre tu campo misionero? ¿Qué documentales puedes ver para estar mejor informado acerca de tu región o ciudad en particular? Comienza ahora a tomar estos pasos que comenzarán a darte una perspectiva de la cultura de la gente a la que estarás ministrando.
Visa: ¿Qué tipo de visa necesitarás solicitar? ¿Qué tipo de información necesitarás preparar para poder obtener tu visa? ¿Es posible solicitarla mientras estás en tu país, o hacerlo luego de llegar al otro país? ¿Hay misioneros que ya estén en este lugar que te puedan ayudar a adelantar algún proceso?
Seguro Médico: ¿Qué tipo de seguro médico es el mejor para ti y tu familia? Este es un paso muy importante que debe de investigarse de acuerdo al país en el que estarás viviendo. Para algunos países, puede que convenga tener un tipo de seguro médico internacional, mientras que para otros países, esto no será para nada conveniente. Si es posible, pregunta a los misioneros que ya están sirviendo ahí que te orienten en esta área.
Finanzas: Al ver la historia de la iglesia, puedes leer acerca de aquellos que fueron guiados por Dios a confiar en Él completamente con sus finanzas, mientras que otros fueron guiados por Dios a recaudar fondos. ¿A cuál de estos dos te está llamando Dios? Como aquellos en el pasado, cada una de nuestras historias será diferente. Esto es algo en lo que tendrás que buscar al Señor en oración y permitir que Él dirija tus pasos. Algo que yo creo que es muy importante en cuanto al tema de las finanzas es el tema de las deudas. ¿Actualmente te encuentras en deuda? Si es así, comienza desde ahora a tomar pasos para liberarte de cualquier deuda financiera antes de irte al campo misionero. No querrás tener ningún “peso” de deuda financiera sobre tus hombros cuando estés en el campo misionero.
Banco: ¿Cómo vas a manejar tu cuenta bancaria? ¿Existe algún banco en particular que esté conectado con el tuyo? ¿Cuál será el procedimiento que usarás para transferir dinero de tu cuenta bancaria al banco que estarás usando en el extranjero? ¿Habrá algún cargo adicional que resultará muy costoso? Los pasos que tomes de antemano en esta área te ayudarán a ser un buen mayordomo de los recursos que Dios te ha dado.
Sé que algunos de estos pasos logísticos pueden ser laboriosos y desalentadores en algunos casos, pero entre más preparado estés antes de que te vayas, mejor te irá cuando estés en el campo misionero.
3. ORACIÓN
¡La oración no se puede sobre enfatizar! Mientras comienzas a organizar un equipo de apoyo y tomas los pasos necesarios para llevar a cabo los pasos logísticos en orden, será muy importante que te reúnas con otros en oración de manera regular. Dependiendo de cuánto tiempo te queda antes de partir al campo misionero, procura programar una junta de oración donde pueda asistir tu equipo de apoyo y otras personas. Ya sea una reunión semanal, cada dos semanas o mensual, asegúrate de que todo lo que hagas, tanto práctico como espiritual, esté naciendo de la oración. Estarás asombrado al ver a Dios obrar en todas las áreas mencionadas y en muchas otras al juntarte con otros en oración.